El 11 de febrero se realizó la Asamblea Ordinaria y normalizadora de la Sociedad de Fomento Santa Paula.
Entrar otra vez después de 6 años a ese edificio y verlo en las condiciones en que está, de abandono, vacío, oscuro, ultrajado, nos recordó sus épocas de apogeo, los aniversarios, las fiestas, las clases de infinidad de actividades para chicos y grandes, la posta sanitaria, los carnavales, las asambleas colmadas de vecinos, las reuniones de seguridad, todo lo que lo hacía el centro del barrio, el corazón de esa comunidad, ahora veíamos solamente un galpón.
Durante el periodo que duró el reempadronamiento se registraron 53 socios, algunos nuevos, que nunca antes habían formado parte de la entidad y otros que en su momento incluso integraron parte de las comisiones directivas.
Luego de la hora de espera, se dio inicio a asamblea con la firma de 20 socios presentes, que rápidamente se fueron retirando. A las 19 horas el interventor Hugo Toso tomó la palabra para dar lectura al orden del día y elegir a quien presidiría la asamblea y a dos socios para firmar el acta junto al interventor, sin sorpresas se designaron a Federico Huergo para presidir la asamblea y a César Rodríguez y Maximiliano Martín para firmar el acta.
Toso explicó y dio lectura a los resultados de los balances que se fueron aprobando uno a uno, también aprobaron la cuota social de 150 pesos y por último se aprobó por unanimidad la lista única celeste y blanca para la conformación de la ‘nueva’ comisión directiva.
Según el interventor había que hacer de cualquier forma la asamblea para que APAND no se quede con la sede, la realidad es que antes de que ocurra algo así habría corrido mucho tiempo como para revisar opciones.
En la lista pudimos ver que vuelven a la comisión varios de los responsables de haber permitido, de mínima, que pasaran las cosas que pasaron de 2016 a esta parte.
El nuevo presidente de la entidad es Federico Huergo y el tesorero, César Rodríguez, pareja y padre de la primera revisora de cuentas Anahí Rodríguez, el vicepresidente es Pedro Carriño y Laura Carriño es la segunda revisora de cuentas, el último presidente de la entidad, durante el periodo de su desmantelamiento, Alberto Abeldaño, es ahora tercer vocal titular.
Deseamos como todos los vecinos que la entidad vuelva a ser lo que era antes de las fiestas clandestinas y de los saqueos, esperamos que vuelva a ser un poco la segunda casa de todos en el barrio, el lugar de encuentros y no de desencuentros. Esperamos que los que ahora se hacen cargo, recuperen cada pérdida que haya sufrido la entidad en estos años, pero sobre todo, que en esta ’nueva oportunidad’ le devuelvan el corazón a Santa Paula.
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