Ante las reiteradas apariciones de ofidios en nuestra zona me pareció importante aportar algunos datos esclarecedores.
El término Víbora se usa como sinónimo de venenosa, pero en realidad, viene del término vipare que significa parir vivo, hace referencia a un grupo de ofidios capaces de retener los huevos en el interior de su cuerpo hasta que eclosionan, como la Yarará y la cascabel, a diferencia de otras especies que colocan sus huevos en nidos. En cambio, el término Culebra se suele usar como sinónimo de no venenosas, y si bien la mayoría no lo son, algunas tienen venenos.
En la Argentina se han identificado hasta el presente 99 especies de ofidios, de los cuales sólo tres géneros fácilmente reconocibles son temibles para el hombre por su veneno. El género Bothrops al que pertenecen las “Yararaes” con siete especies, cuatro de las cuales se encuentran únicamente en la provincia de Misiones; el género Crotalus al que pertenece la serpiente de “Cascabel” con una sola especie y el género Micrurus que incluye a la “Coral”.
En esta zona habitan dos especies que pueden causar daños a las personas si son mordidas por ellas y son la Bothrops alternatus o “yarará de la cruz” y la Bothrops ammodytoides o “yarara ñata”, y debemos decir que la casi totalidad de los accidentes de nuestro país se deben al género bothrops.
IDENTIFICACIÓN DE LAS VÍBORAS VENENOSAS
Para el reconocimiento de las víboras se ha insistido frecuentemente con la observación de ciertos caracteres morfológicos como: forma de la cabeza, presencia o no de cuello, pupila elíptica y vertical, la forma de terminación de la cola, y si bien pueden ser útiles como guía no deben ser consideradas patognomónicas de las especies venenosas, dado que en nuestro medio se observan también en algunas culebras inofensivas.
Los géneros Bothrops pertenecen a la familia Crotalidae y se caracterizan por la presencia de foseta loreal, también llamadas cavidades termo-receptoras, situadas entre la fosa nasal y el ojo, al, parecer son dispositivos que permiten captar estímulos térmicos leves lo que facilita la localización de presas de sangre caliente aún en la oscuridad.
La única característica indiscutible de las víboras es la presencia de la llamada “foseta loreal”. Se llama “loreal” a la zona ubicada delante del ojo, detrás de las fosas nasales y encima de la boca. La presencia de un orificio en esa zona da la certeza de que se trata de una víbora (“yarará” o “cascabel”). Si ese orificio falta, se trata de una culebra o de una boa.
EN CASO DE MORDEDURAS
En caso de visualizar un ofidio lo aconsejable es alejar y resguardar a las personas y mascotas, puede llamar a los bomberos, a defensa civil o a guardaparques.
En caso de mordeduras deben evitarse: – El uso de torniquetes – Las incisiones, cauterizaciones en el sitio de la mordedura y – Las Inyección del suero “insitu,” pues aumenta el edema y la isquemia.
En caso de una mordedura de ofidio hacia una mascota se deberá trasladar inmediatamente a la mascota, hacia la veterinaria más cercana.
En caso de mordedura hacia una persona deberá mantener la calma y trasladarla al centro asistencial más cercano.
El suero neutraliza el veneno, pero no cura las lesiones constituidas, de allí radica la importancia de su administración precoz, por la vía más adecuada, debe ser específico para la especie y a dosis suficiente como para neutralizar las acciones del veneno.
MEDIDAS PREVENTIVAS
1- Mantener el pasto corto, alrededor de su casa, de esta forma podrá visualizar su existencia.
2- Evitar acumulación de basura, dado que ésta atrae a los roedores y por ende a los ofidios.
3- Evite caminar por el pasto alto y malezas o hacerlo con vestimenta adecuada, pantalones de loneta con botamanga ancha y botas de caña alta.
4- Al realizar trabajos de parquizado, manipulación de leña o remover la tierra, debemos con antelación visualizar que no haya ningún riesgo cercano. Si llegase a trabajar en alguno de estos antes mencionados, deberá usar protección, guantes de vaqueta o descarne.
Eduardo Antonio Menegheni
Dr. en Ciencia Veterinaria
MP 136 – UN del Noreste
Facultad de Agronomía y Veterinaria de Corrientes
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